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jueves, 24 de marzo de 2011

LOS DÍAS DE SERGIO TIENEN 48H

Leyendo la revista "Mujer Hoy" de 12 de marzo de 2011 encontré un artículo muy interesante sobre un niño con déficit de atención por hiperactividad; tiene ocho años y se llama Sergio.
Aunque mi intención era poneros el link para que pudieseis de esta forma leer el artículo completo no he sido capaz de encontrar el mismo en la página web de la revista, por lo que tendré que explicaroslo a grandes rasogos.
No obstante si os interesa guardo la revista.

Sergio es un torbellino, juega, salta, ríe, corre... y no está ni un minuto sentado. Como el 5% de los niños, sufre un trastorno por déficit de atención con hiperactividad, que afecta a toda su familia.
El artículo nos narra lo que supone "un día en la vida de un huracán de ocho años como Sergio" desde que se levanta hasta que se acuesta.
La familia nos cuenta lo difícil que fue abordar este prolema al principio, cuando a los cuatro años le llevaron al psiquiatra del Hospital Niño Jesús de Madrid, para descubrir que su hijo "era un caso de libro". Admiten que fue un alivio saber lo que le ocurría y que desde entonces su vida ha cambiado por completo.
Desde hace dos años se toma una pastilla por la mañana y no sólo es más tranquilo sino también más centrado, aunque como toda medicación, no está exenta de polémica, los expertos afirman que el tratamiento no genera tolerancia ni adicción pero tampoco es curativo y por sí solo, es insuficiente.
La madre nos comenta cómo cada mañana al levantarse, tiene que estar detrás de Sergio continuamente, porque le tiene que ir diciendo lo que tiene que hacer y no una, ni dos sino hasta tres veces. A la hora del desayuno mientras el resto de la familia se sienta en la mesa, Sergio está de pie jugando con una consola. Nunca come ni cena sentado, además siempre tiene que estar haciendo dos cosas a la vez. En el coche de camino al cole, han conseguido que sergio se siente y se ponga el cinturón porque hace un par de años, saltaba, se cambiaba al asiento de alante... En el colegio, su tutora le da clase por primera vez y explica como los primeros meses fueron un poco complicados porque tuvieron que adaptarse el uno al otro y cambiar la forma de trabajar, nos confiesa que con Sergio funciona muy bien el refuerzo cuando hace algo bien, porque le motiva y cuando quiere decirle algo tiene que mirarle a los ojos. Al salir del cole Sergio se queda jugando a fútol un buen rato antes de ir a casa para hacer los deberes, otra tarea dura y que requiere estar pendiente del el en cada momento. Antes de cenar tiene que jugar otra vez a la consola, ajedrez,play... y mientras cena está saltando y viendo la tele.
Es la hora de ir a la cama, único momento de tranquilidad de los padres, aunque Sergio confiesa que tarda mucho en dormirse y que juega con la consola hasta que le entra el sueño.

2 comentarios:

  1. Creo que esta entrada está muy bien para conocer casos reales de este trastorno, para ver como se vive y como se afronta este caso desde la familia y desde el colegio.

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  2. Yo, no soy partidaria de las pastillas para solucionar algún problema como este, pero la verdad que en este caso era necesario, ya que no se podría vivir así. Es muy interesante este articulo.

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